Pero ¿y si no me gusta lo que hago?

 
Sé el mejor en lo que haces,era el mensaje que recibía de mi familia, de maestros y de muchos adultos que buscaban que me esforzara al máximo en lo que quisiera ser de grande. Así recibía una lección de vida, de la boca de varias personas. Sin embargo y casi al mismo tiempo aprendía otra, que no me lo decían pero era demostrado con ejemplos de la sociedad, ya sea en la familia, en la escuela, en la televisión y cualquier otro medio que pudiera impactar en mi forma de pensar y ahora te la comparto.

Cuando tenía 6 o 7 años, mi deseo era ser médico pediatra, aunque mi mamá creía que la razón era porque me gustaban los niños, mi mayor intención era que los pequeños no sintieran dolor. Después fue brevemente ser dentista, luego regresé a médico cirujano. Todas las anteriores con el noble objetivo de ayudar a mi familia y a otros. 

Pero eso no se podía quedar así y fue cuando la otra lección que estaba recibiendo entro en juego. El dinero, el estatus social, el prestigio o la popularidad tenían en común ser asociados con una persona "exitosa". Ahi fue cuando tratando de seguir en la profesión cambié la especialidad. A los 11 años quería ser, cirujano plástico, no tanto por la medicina y ayudar a sanar enfermedades o dolores de la gente, ahora lo pensaba porque creía que era la especialidad que más dinero traía y todas las añadiduras que vienen con el. Entré a la secundaria, conocí la química y el mismo pensamiento me llevó a estudiar una ingeniería. De nueva cuenta, con una parte de la decisión tomada por motivos económicos y la otra porque me llamaba la atención. Hoy soy Ingeniero Químico, sí con un gusto por mi carrera pero con algo que se torció en el camino.

Y tú ¿que querías ser de grande? 

Por eso esta entrada, porque pueden existir personas que terminaron estudiando lo que no querían por motivos económicos, familiares o sociales. Entonces viene la presión de "Ser el mejor" que ya toqué en un post pasado. Y viene la pregunta que le da título a esta entrada ¿Y sí no te gusta lo que haces?

¿Cómo podrás exigirte ser "la mejor" o "el mejor" en tu profesión si no lo disfrutas? Por eso hay personas que insisten en que busques tu objetivo personal, que sigas tus dones, que encuentres tu pasión o alguna variante. La idea es que estés "trabajando" en lo que te gusta. Y si estás en eso que te gusta y a pesar de eso tienes muchas quejas, siempre es bueno regresar al origen, al motivo que hizo que comenzaras en primer lugar.

Eso hará que busques información por gusto, que la práctica sea amena, que los lunes no sean pesados y que no estés preguntando cuando es el próximo puente o las siguientes vacaciones. No necesitarás "huir" de tu vida laboral.

Lo que te pueda decir está de más, lo único que te invito es a pensar en lo que has leído y que te preguntes si estás disfrutando tu trabajo o profesión, que si puedes cambiar algo para hacerlo más agradable o sencillamente si estás buscando un incentivo para por fin decidirte hacer "ESO" que estás pensando, todo depende de ti. Esa es la invitación de esta semana. 
web: live.vcita.com/site/coachjcm

PD: Tengo para ti un ejercicio totalmente gratis de los que utilizo en las sesiones de Coaching. Da click AQUI y solicítalo o pide una sesión gratis presencial o en línea AQUÍ

La competencia personal



Después de borrar 3 o 4 introducciones para esta entrada, simplemente decidí decirte directamente sobre lo que te quiero hablar. Es una perspectiva diferente al modo de ver esta vida.

Es demasiado común escuchar a la gente decir, que TIENES que ser el #1, el mejor, volverte indispensable o alguna variante. Vivimos bajo la creencia de que solamente existe "El mejor o La mejor" que ese puesto privilegiado en la cima de la montaña solamente la puede ocupar 1 persona. Debido a esto hay quien piensa que debe destronar a quien se encuentre ahí por los medios posibles, por lo tanto, aquella persona que destaca en algún trabajo o actividad mágicamente le aparece una diana para que el resto sepa a quien hay que atacar.

Este pensamiento también se puede ver en los deportes individuales, cuando ciertos atletas son señalados porque "se derrumban bajo presión". Algunos de ellos suelen recurrir a un psicólogo, un mental-coach e incluso al hipnotismo para mejorar su desempeño en el momento de la competencia.

Lo que psicólogos y coachs han descubierto es que algunos de estos atletas tenían una creencia en común que les limitaba, que estaban compitiendo contra los mejores del mundo y ellos no se creían así. Te platico el caso especial de una nadadora que sus mejores tiempos los hacía en entrenamiento y en la competencia algo pasaba. Descubrió que en entrenamientos solamente era ella y en la competencia con el simple acto de voltear a sus lados a ver a las demás nadadoras le ponía esta presión que disminuía su habilidad.

¿Impresionante no? como una sola mirada a otra persona y la comparación puede hacer que no puedas ocupar tus habilidades o capacidades al máximo. Después de descubrir esto, en el trabajo con su coach cambió su enfoque. Dejó de ver a las competidoras, no porque no le importaban o porque supiera que si las veía no podría explotar a su máximo. 

Dejó de verlas porque ahora tenia una competencia aún más exigente. Ahora estaba decidida y enfocada a competir contra sí misma. Contra sus mejores tiempos en la alberca, contra su mejor desempeño, contra su mejor actitud, contra su mejor día. Lo impresionante de este cambio fue que no se limitó a sus competencias en la alberca, mejoró sus relaciones personales, su actitud ante la competencia y la vida.

¿Cómo aplicarlo a la vida?

En otro post, te platicaba de lo que significa crearte con una idea muy específica de quien quieres ser. Hoy te tengo esta otra perspectiva. Deja de compararte con los demás y reconoce que la mayor de las batallas está en la competencia contra ti. Que este deseo de ser mejor de lo que fuiste ayer te dará muchas satisfacciones, cambiará tu forma de ver la vida, agradecerás las lecciones de otras personas, podrás compartir experiencias y sabrás que no existe el #1, porque cada quien es especial y que la batalla es contra ti. Hoy piensa en lo que puedes lograr, en eso que sabes que tienes que cambiar y no lo has hecho tal vez justificándote porque alguien más también lo hace, la magia de lo inimaginable sucederá si hoy eres mejor que ayer y los límites no existirán en tu vida.

¿Te atreves? 

web: live.vcita.com/site/coachjcm

PD: Recuerda que tengo para ti un ejercicio totalmente gratis de los que utilizo en las sesiones de Coaching. Da click AQUI y solicítalo o pide una sesión gratis presencial o en línea AQUÍ

El cambio con una pregunta



Hoy te comparto algo de lo que me sucedió en una sesión de coaching, pero siendo el cliente y no el coach. Estábamos explorando los significados personales de ciertas palabras, cuando me tocó explicar qué era para mi la disciplina.

Le comentaba al Coach que para mi había tenido un toque de obligación y cierta carga negativa la palabra. Pues en la escuela algunos maestros calificaban la disciplina como el estar sentado todo el día, sin hablar, sin moverse y simplemente limitando mi energía a un pupitre. A esa edad, solía tener mis boletas con buenas calificaciones pero con una queja constante. "Termina sus actividades y se levanta a jugar con sus compañeros y a algunos los distrae"

Así que esa palabra se quedó con cierto pragmatismo debido a mis actividades. Por lo cual, pensaba en la disciplina como una forma de limitar, cuadrar o formar a una persona de acuerdo a lo que otra pensaba que era lo correcto.

Sin embargo, en la sesión coaching, al ser cuestionado y ya con edad suficiente como para conocer más a fondo los beneficios de mantener esta característica personal funcionando, comentaba que no me gustaba la idea de seguir con este sentimiento negativo. y fue ahí cuando sucedió.

¿En qué me ayuda la disciplina?

Mientras le explicaba, vino a mi cabeza esta pregunta. Y la respuesta me liberó de cierta forma. Pensando en que me ayuda en cumplir mis tareas, en llegar a tiempo a mis citas, a levantarme sin pesar por las mañanas y en general a cumplir mis objetivos.

Con esas respuestas, pude hacer una generalización que me ayudo a tener otra visión. La disciplina me estaba ayudando a pelear, es una herramienta que tengo contra todo lo que me impide avanzar. La desidia, la pereza, procrastinar, buscar excusas, y la lista sigue.

A partir de ese momento he aprendido a abrazar la palabra y a trabajar para incluirla en mi lista de valores preciados. Pues la constancia y el trabajo son tan importantes como el talento. Saber que si he de tener una batalla personal de costumbres y actitudes que no me sirven, ahora cuento con una herramienta más para hacerle frente en esos momentos donde quieren reclamar su puesto en mi vida.

¿Y que tal tu disciplina?

web: live.vcita.com/site/coachjcm

PD: Recuerda que tengo para ti un ejercicio totalmente gratis de los que utilizo en las sesiones de Coaching. Da click AQUI y solicítalo o pide una sesión gratis presencial o en línea AQUÍ

Que tal otra opinión


Resultado de imagen para paso a paso


En esta vida tenemos la oportunidad de cruzarnos con muchas personas, algunas de ellas nos acompañarán más que otras. La mayoría tendrán algo que enseñar, mediante el ejemplo, con un consejo o simplemente al saber que es lo que no se tiene que hacer.

Muchas de estas lecciones pueden pasar desapercibidas por un instinto personal conocido como "a mi manera". Es cuando creemos tener la solución, la respuesta o el método correcto para resolver las situaciones que se nos presenten.

Quiero ser muy honesto contigo, hace algunos años una persona me describía así... "Quien no te conozca que te compre, cada que te metes en algún problema siempre lo quieres solucionar a tu forma, solamente cuando ves que no funciona, te acuerdas de los consejos que alguien te dijo y solo así lo tomas en cuenta"

¿Alguien más se identifica con esto?


Existen momentos donde podemos lidiar con lo que la vida nos presenta, hay otros que recurrimos a quien sea, buscando el consejo que nos ayude a salir de donde estamos o simplemente buscamos a alguien que nos diga exactamente lo que queremos escuchar, más que un consejero, es un cómplice de una decisión ya tomada.

Sin embargo pocas personas tienen a alguien con quien puedan recurrir habitualmente y lo consideren una guía, un consejero o un maestro. Los apóstoles tenían a Jesús, Aristóteles a Platón y Platón a Sócrates.

Aunque no conozcas a alguien con las características para ser tu "guía" si conoces las características que esa persona te gustaría que tuviera. O tal ves conozcas a alguien simplemente de vista. La imaginación puede hacer el resto. ¿Qué te diría esa persona de tu situación actual? o mejor aún, piensa en esa persona que es la mejor versión de ti y pregúntate si estarías haciendo lo que ahora haces.

A veces un cambio de posición perceptual puede ayudar a aclarar tus próximas acciones.

web: live.vcita.com/site/coachjcm

PD: Recuerda que tengo para ti un ejercicio totalmente gratis de los que utilizo en las sesiones de Coaching. Da click AQUI y solicítalo o pide una sesión gratis presencial o en línea AQUÍ